Screening del primer trimestre de embarazo
El screening es una prueba de cribado o rastreo (en inglés, screening) que se le realiza a la embarazada para detectar posibles alteraciones genéticas del embrión.
Se realiza de forma rutinaria en todos los embarazos para ver si el embrión tiene riesgos de tener una anomalía cromosómica, como: síndrome de Down o trismomía 21, síndrome de Edward o trisomía 18 y síndrome de Patau o trisomía 13.
¿Cuándo y cómo se hace? Se realiza durante el primer trimestre del embarazo (11 y 13 semanas de gestación). Consiste en la realización en el mismo día de:
- Ecografía (Traslucencia Nucal – TN)
- Análisis de sangre
¿Qué beneficios tiene? Los beneficios de realizarlo son conocer las probabilidades de que el embrión tenga una anomalía genética de los referidas que nos permite planificar el seguimiento y exámenes a realizar durante el embarazo, y poder hacer, posteriormente, (con otros estudios) un diagnóstico precoz.
¿Tiene riesgos? No presentan riesgos, solo pueden presentarse algunas molestias propias de una extracción de sangre.
¿Cuáles pueden ser los resultados del screening? De riesgo bajo o de riesgo alto. Un resultado de riesgo bajo no excluye una alteración, ya que es una prueba de detección de riesgo; en este caso continúas con el control habitual del embarazo en tu Centro de Salud. Las pruebas de riesgo alto no significan, necesariamente, que haya una alteración, pero requerirán la realización de pruebas diagnósticas adicionales para su confirmación, como la Biopsia de Vellosidad Corial o la Amniocentesis para confirmar diagnóstico.
Es importante recordar que esta es una prueba de cribado y no de diagnóstico. Si los resultados indican que podría haber un problema, es necesario hacer más exámenes para confirmar o descartar el diagnóstico.