¿Qué es el Preparto?
El preparto es la etapa previa al comienzo del trabajo de parto que se caracteriza por la aparición de contracciones irregulares, en intensidad y en duración y pueden desaparecen al descansar o cambiar de posición. Esta etapa es muy diferente de una mujer a otra, y en la misma mujer puede diferir mucho de un parto a otro.
El preparto puede durar semanas, días u horas. Puede que esas contracciones que empezaron suaves y tímidas se instalen para iniciar el trabajo de parto o cesen para arrancar en otro momento. No sabemos con certeza cómo será cada trabajo de parto. Cada mujer y cada bebé tienen un tiempo preciso, no hay estándares a la hora del nacimiento.
Estas contracciones tienen el objetivo de ir preparando nuestro cuerpo para el trabajo de parto, es en este período que se produce el reblandecimiento y maduración del cuello del útero, motivo por el cual solemos perder el tapón mucoso en esta etapa.
¿Cómo podemos diferenciar el preparto del trabajo de parto?
En el trabajo de parto las contracciones uterinas son regulares en intensidad y duración y suelen aparecer de 3 a 5 contracción en 10 minutos. Una vez que comienzan no ceden con el reposo.
Es importante pensar de que manera queremos atravesar este momento. Contracción tras contracción, Ola a ola. Sin apuros, viviendo y entregándonos a este momento. Para esto es importante que nuestro cuerpo tenga recursos ya atravesados durante el embrazo y que puedas reconocerlos como posibilidad. Cómo lo son los diferentes movimiento y posiciones posibles a adoptar. Es importante que puedas ir adoptando estas posturas durante el embarazo para poder incorporarlas en el momento que las necesites.
En esta placa te dejamos algunas ideas para que puedes ir explorando:
Balanceo: menea la pelvis, baila, haz círculos. Cualquier movimiento que te genere placer y que te ayude a mantenerte en vertical. El movimiento y la verticalidad ayudarán a que el bebé descienda sobre la pelvis.
Masajes: Los masajes suelen aliviar la tensión, no solo en el sacro sino en la parte del cuerpo que te ayude a relajarte.
Gravedad: Mantenernos en movimiento, en vertical, caminando, andando, son herramientas que tu cuerpo tiene para atravesar esta etapa.
Descansar: esto es muy importante, al descansar déjate mimar, un masaje, una caricia o alguno de los movimientos asistido por tu acompañante son grandes recursos para el descanso.
Confía en vos y en tu bebé. Entrégate sin tiempos.